Job 36:11

"Si oyeren y le sirvieren acabarán sus días en bienestar y sus años en dicha". Job 36:11
 
Aunque muchos no lo crean, Dios nos ha permitido la vida para que seamos felices. Sin embargo, el ser humano tiene la particularidad de complicarse la existencia y hace, en muchas ocasiones, lo que no debe; es frecuente que se sienta atraído por las tentaciones del mundo y su debilidad carnal le permite caer en el pecado. Es así como las personas caen en adicciones, infidelidades, chismes, derrotas, contiendas, violencia y poco a poco se van alejando del propósito para el cual fueron creados.  Desde siempre, Dios ha reconocido la debilidad del hombre y por eso su Palabra menciona: "diga el débil fuerte soy" y esa fortaleza es posible cuando reconocemos que ya no vivimos nosotros sino que es Cristo quien vive en nuestro ser. La presencia del Espíritu del Señor en el ser humano le permite resistir las asechanzas del diablo y salir airoso de múltiples pruebas al otorgarle dirección a sus pasos, fuerza y conocimiento para derrotar al diablo y sabiduría para permanecer firmes en la Palabra del Señor. Si nos tomamos el tiempo para conocer a Dios, si creemos en su Palabra y le servimos llevándola a la práctica entonces podremos vivir en paz todos los días de nuestra vida y al final tendremos la satisfacción de haber hecho lo correcto al haber guardado nuestro corazón.